Antofagasta, (@JUNJI_Antofa). Salas sensoriales, experiencias de aprendizaje que estimulan los sentidos y cientos de familias agradecidas, fue el aporte entregado por profesionales de Senadis en cinco espacios educativos de la Junji Antofagasta, gracias al convenio firmado entre ambas instituciones en 2013.
En esta ocasión, y dando cierre al periodo 2019, autoridades regionales se reunieron para reconocer y agradecer a cada profesional que trabajó en el mencionado programa. Durante el año pasado, 769 niños y niñas recibieron atención kinesiológica y psicopedagógica en los jardines infantiles: “Mi Banderita Chilena”, “Tortuguina”, “Caracolito”, “Bambi” y “Dumbo”.
“La incorporación de duplas de profesionales, con ciertas características y competencias, como un psicopedagogo y un kinesiólogo, brindan oportunidades infinitas para el desarrollo de niños y niñas que están en etapa de educación inicial”, fueron las palabras de Lidia Julio, directora regional de la Junji, quien además añadió que “el programa de ‘Atención Temprana’, también permite potenciar las capacidades y competencias de nuestros equipos educativos que desarrollan las experiencias pedagógicas en aula”.
Para Marcela Flores, apoderada del Jardín Infantil “Bambi”, enfrentar que su hijo sufriera una parálisis del brazo izquierdo luego de sufrir un accidente casero, fue un golpe devastador para el proceso educativo, sin embargo, el programa fue clave en su adaptación.
“El proceso al principio fue difícil, porque uno piensa que todo va a complicarse, e incluso cuesta adaptarse a las nuevas condiciones. El estado de salud de mi hijo desde un principio fue muy delicado y, además, no teníamos conocimiento de cuánto tiempo tardaría su recuperación, por lo que fue muy complejo adaptarse, pero con la ayuda del jardín de Junji, logramos alivianar el peso que representa vivir con estas condiciones. Tuve mucha suerte también, porque las educadoras que estaban en la sala de mi hijo tenían experiencia en trato con niños con necesidades educativas especiales. Ellas me ayudaron mucho para poder sobrellevar mi situación”, enfatizó Flores.
El relato de Marcela Flores refleja el acompañamiento y apoyo a las familias que tiene por objetivo el convenio. Los profesionales estimulan la coordinación en triada (familia, jardín infantil y especialistas) para lograr el bienestar de los niños y niñas.
“La evolución de mi hijo tuvo un cambio tremendamente positivo. Él llegó sin mover su brazo izquierdo, tampoco podía recibir golpes en su cabeza. Y desde que recibió la intervención de los profesionales de la dupla Junji – Senadis, ahora corre por todo el patio, sube a los juegos. Que tenga una vida de un niño normal, y que comparta con sus compañeros sin problemas es maravilloso”, finalizó la apoderada.
Por su parte, David Martínez, director regional de Senadis señaló que los logros obtenidos en los jardines infantiles de la Junji, en relación con necesidades educativas especiales, se reflejan en cada familia y en la comunidad educativa.
“Es una alegría enorme ver que el principal propósito que tenemos como Senadis, que es promover una cultura de inclusión, también se esté potenciando desde la primera infancia y eso, fue gracias al excelente trabajo que realizó la dupla de profesionales que fue parte del programa”, agregó Martínez.