Iquique, (@JUNJI_Tarapaca). Una innovadora y entretenida experiencia educativa, es la que está desarrollando la comunidad del Jardín infantil “Pasitos el Sur” dependiente de la Junji Tarapacá. Se trata de las “Bombas de Semilla”.
La iniciativa busca que los niños y niñas reconozcan en forma directa, una variedad progresiva de semillas respecto a sus características, contrastando semejanzas y diferencias en torno a su tamaño y color, “y los párvulos al momento de hacerlo y descubrirlo, lo expresan con su cuerpo a través de diferentes movimientos en situaciones de juego. Lo que refuerza que el juego es el motor de los aprendizajes”, explicó la directora del jardín infantil Karen Rojas.
Los protagonistas de esta actividad pedagógica, son los niños y niñas del nivel medio heterogéneo que están a cargo de la educadora de párvulos Joy Ayala y la técnico Patricia Soto, quienes además, son las encargadas del énfasis medio ambiente del establecimiento, y que con la actividad, buscan lograr aprendizajes de calidad, reforzar el cuidado y respeto por planeta a lo que se suma, además, que el sello del jardín infantil es el desarrollo de una conciencia medio ambiental.
La experiencia educativa “Bombas de Semillas” es una actividad educativa innovadora, explicó la directora de la unidad educativa “ya que, se está regalando vida sustentable a la comunidad circundante de nuestra unidad educativa, estas bolitas en su interior poseen abono y semillas, las cuales se mantienen protegidas mientras ella se endurece, al entrar en contacto con el agua y sin tener necesidad de enterrarla, la bomba comienza a disolverse y al mojarla se da paso a la germinación de una planta, que con el paso de los días se enraíza y crece”.
Para hacerlas no son muchos los materiales que se requieren: deben tener papel (diario u otro), papel absorbente (servilletas por ejemplo), semillas recicladas (podrían ser pepas de tomates), una fuente con agua y tierra de hoja.
El proceso consiste en poner, un puñado de tierra de hoja, sobre un cuadrado de papel humedecido (de unos 15 centímetros), posteriormente agregar las semillas en el centro y cerrarlo modelando una bolita. Luego el exceso de agua se seca con el absorbente y queda lista la bombita de semilla.
Los niños y niñas, son los protagonistas del proyecto, y lo han realizado desde sus hogares en este periodo de pandemia. En sus casas y con apoyo de sus familias, elaboran las bombas de semilla siguiendo las indicaciones contenidas en las cápsulas educativas que han sido enviadas, por los equipos educativos, través de la atención remota. Y ellos siguiendo las indicaciones manipulan los diferentes materiales de trabajo para elaborar estas bombas, así como también van adquiriendo conceptos nuevos y comienzan a comprometerse responsablemente con el cuidado del medio ambiente, lo que va asociado al objetivo del experiencia pedagógica.
Familias
Para la Junji, el rol de las familias es fundamental como agente educativo, lo que en tiempos de pandemia se ha acrecentado aún más. “Los padres o adultos responsables de los párvulos han sido indispensables, en la educación remota, y en particular en este proyecto, han sido los que han aportado primero en reciclar las semillas de las verduras y frutas que tenían en su hogar, además de acompañar el proceso educativo y en la ejecución de la experiencia de aprendizaje. Por lo que estamos felices con los resultados y la tremenda colaboración de las familias”, comentó Rojas.
El trabajo de vinculación con el entorno que ha desarrollado el jardín infantil, es muy importante también “ya que como unidad educativa estamos insertos en un barrio y somos parte de él. Es por ello que también la comunidad circundante ha conocido la iniciativa, recibiendo de regalo las bombas de semillas, conociendo de esta forma el innovador proyecto educativo. Lo recibieron felices porque es una forma también de impulsar pequeñas zonas verdes en la población”, sostuvo.
Otras experiencias
El Jardín Infantil “Pasitos del Sur”, trabaja permanentemente con un gran compromiso con el medio ambiente, y a través de su Centro de Padres, gestionó la instalación de un contenedor de botellas plásticas, que se ubicara en las dependencias la unidad educativa.
Por lo que la directora Karen Rojas, invita a la comunidad circundante a practicar el reciclaje, ya que es una acción eco-amigable, que consiste en someter residuos o elementos fuera de uso a un proceso de transformación, para así provecharlo como como materia prima, evitando tener que recurrir al uso de recurso naturales.
“Es de suma importancia destacar que este proceso requiere del compromiso y el trabajo con toda la comunidad educativa, ya que, al depositar las botellas plásticas, se debe tener precaución de depositarlas sin residuos líquidos u orgánicos en su interior que pueda contaminarlo, con el propósito de evitar la proliferación de vectores (moscas) y malos olores. Finalmente, estas botellas serán retiradas por la empresa “Recynor” líderes de la zona norte en el reciclaje inteligente “y con los cuales formamos alianzas de trabajo colaborativo en post del medio ambiente”, aseguró la profesional.