Iquique, (@JUNJI_Tarapaca). Una interesante experiencia pedagógica intercultural, es en la que participaron las niñas y niños de cinco establecimientos parvularios de la Junta Nacional de Jardines Infantiles, JUNJI Tarapacá.
Se trató del proyecto denominado “Originarios”, actividad educativa, implementada con el propósito de visibilizar, reconocer y valorar la diversidad cultural de los pueblos originarios, vinculando la educación que los niños y niñas reciben en su contexto familiar y comunitario, con la educación que se les brinda diariamente en las aulas de los jardines infantiles.
Los jardines infantiles que tuvieron la experiencia pedagógica fueron: Quri Mayiri, Purum Naira de la comuna de Alto Hospicio; Los Patitos, Caracolito y Payasito de Iquique.
Dayanna Figueroa, asesora intercultural, explicó que el objetivo de “Originarios” es promover la importancia del derecho de niños y niñas a tener la identidad cultural propia de su sus familias y comunidad y así también promover el valor del respeto a toda persona, para favorecer un ambiente educativo intercultural, promoviendo que un currículo contextualizado culturalmente es capaz de dar respuesta a la comunidad educativa en la cual se inserta.
Agregó que en la iniciativa participan diez Educadoras de Lengua y Cultura Indígena (ELCI), con el afán de aportar en la promoción de prácticas educativas interculturales.
“El proyecto Originarios se trabajó en las comunidades, en donde no existe la presencia que las ELCI, pero que sí cuentan con familias con ascendencia de diferentes pueblos originarios y que no pertenecieran a la cultura aymara, ya que, ellas serían las que compartirían esos saberes”, puntualizó.
Figueroa, explicó que la propuesta pedagógica, tuvo como objetivo que los párvulos pudieran reconocer y valorar la diversidad cultural en lo relativo a pueblos originarios, a través de espacios educativos que los llevaron a conocer de una manera lúdica y concreta.
“Como equipo, entendemos a las niñas y niños como sujetos de derechos y protagonistas de sus aprendizajes, por cuanto se brindó diversas oportunidades de aprendizaje vinculadas a las lenguas originarias, cosmovisión, costumbres, creencias y conocimiento ancestral que son parte de los contextos cotidianos en los que viven crecen y se desarrollan”.
En la jornada, además se destacó la participación de las familias, quienes primero generaron los espacios educativos en conjunto con el equipo, aportando con elementos culturales como objetos, vestimentas, alimentos, entre otros, ya que, precisamente lo que se quiso mostrar de manera concreta para los párvulos, es la diversidad cultural presente en el territorio, de donde interactúan con la cultura quechua, mapuche, diaguita y rapanui, así como también compartir de manera empírica con los párvulos su propia cultura y aportar mediante diversos elementos a la diversidad que enriquece a las comunidades, y que impacta directamente en el proceso de construcción de la identidad de niños y niñas en esta etapa de sus vidas.