Santiago, (@JUNJI_RM). Establecer métodos de autocuidado, horarios y rutinas en niñas y niños, fueron las principales temáticas realizadas en el diálogo participativo ciudadano, que tienen como finalidad mantener el contacto efectivo y afectivo con las familias de las unidades educativas.
Bajo el nombre de “Adaptación y retorno a las actividades en educación parvularia”, se realizaron nuevos diálogos vía online, que contaron con la participación de Marcela Porras, educadora de párvulos de la Provincia Sur; Elizabeth Rojas, coordinadora Provincial Oriente; Fidelina Venegas, directora del Jardín Infantil “Santa Beatriz” de la comuna de Providencia; Francisca Escobar, encargada de Participación Ciudadana de la Junji Metropolitana; familias del mismo “Santa Beatriz” y del Jardín Infantil “Genaro Arias” de la comuna de Estación Central, quienes conversaron sobre el proceso de adaptación en este inicio de año.
Así fue como se dio inicio a estas instancias de conversación, que en el caso del Jardín Infantil “Genaro Arias”, pudo crear un espacio de diálogo con la unidad educativa y que contó por primera vez, con la participación de un papá, lo cual fue enriquecedor para la unidad educativa, quienes fomentan la incorporación de toda la familia en estas instancias.
Sabemos que la pandemia ha instaurado el desafío de mejorar la comunicación entre las familias y las unidades educativas, problemática que es resuelta a través de los diálogos participativos, donde se busca reforzar la importancia de la adaptación como fuente de aprendizaje, en el escenario actual de incertidumbre, otorgando algunos consejos que pueden seguir las familias junto al jardín infantil, para mejorar el proceso de adaptación en este inicio de año.
Así lo indicó en la instancia Marcela Porras, educadora de párvulos perteneciente a la Provincia Sur, quien expuso sobre la importancia de establecer horarios en las rutinas de las niñas y niños.
“Es relevante regular en conjunto los horarios de descanso y alimentación, establecer rutinas, preparar el descanso, los momentos de alimentación e instaurar ritos como por ejemplo, lectura de un cuento en familia, construir un horario de actividades con sus hijos e hijas que considere tiempos para juego, lectura, actividades en línea o de la vida cotidiana, así como tiempo libre”, explicó.
Siguiendo esta línea, también se hizo hincapié en la importancia de generar instancias de diálogo con las niñas y niños. “Se debe indagar en cómo se sienten, qué situaciones le preocupan, dando respuesta oportuna a sus necesidades, así como responder de manera sensible a las necesidades de los niños, brindando contención emocional, siendo amables, afectuosos, empáticos”, expresó la educadora.
Por otro lado, destacó como consejo el autocuidado y la importancia de incorporarlo en las rutinas diarias, indicando que “es importante establecer rutinas de autocuidado, donde los niños y niñas aprendan a realizar un lavado frecuente de manos, lavado de dientes, limpieza de juguetes y objetos, como también contar con espacios de aprendizaje en la casa como por ejemplo un rincón para jugar, donde puedan tener material reutilizable, elementos de la vida cotidiana, artísticos”.
Asimismo, recalcó el compromiso de las familias en el proceso educativo, como pilar fundamental a la hora de educar. “Los padres y familias son un modelo para sus hijos y que, si se mantienen distancias seguras, hábitos de limpieza como el lavado de mano y trata a los demás con empatía, sus hijos aprenderán de usted”.
Las conversaciones, contaron con la participación de algunas familias, quienes realizaron consultas y contaron sus experiencias. Algunas apoderadas relataron cómo se han adecuado al tema de la adaptación en las tareas del hogar y la forma que han ido adaptando sus horarios para dar espacio al juego y la exploración de las niñas y niños.
Además, se hizo el llamado a no perder la comunicación con las unidades educativas, sobre todo en el contexto actual, donde prima la incertidumbre. Por su parte, las familias agradecieron la oportunidad de haber participado en la instancia, ya que niñas y niños pudieron ver a través de la pantalla a su educadora y así reforzar lazos afectivos.